AGRADECIMIENTO A LA ASOCIACIÓN AEXPE
Cuando me
enteré de que era una enferma me sentí perpleja, absurda, sola, con miedo, con
montones de preguntas que hacer, y a la vez con miedo a que me las contestasen.
Había
dentro de mí una dualidad:
- el ansia
de saber
- y por el
contrario el temor que saber, hiciese no poder soportar la nueva información.
¿A qué me
enfrentaba? me sentía aislada de todos y aislada de mí misma.
Comencé a
pensar en existía una asociación donde podía dirigirme, personas a quien podía
preguntar. Pero ¿quién sería el que me ayudaría? ¿Quién me tendería una mano?
También se
presentaba ante mí la idea de: no puedo decirlo. Me mirarán de forma diferente;
me verán enferma. ¿Por tanto en que me he convertido?
De pronto
conozco la Asociación AEXPE. Con terror decido ir, pero que quede claro que yo
no soy como ellos, está claro, pero iré, algo sacaré.
Al llegar veo caras sonrientes, personas
desconocidas pero cercanas, personas accesibles que me entienden, me
comprenden, personas que con sus miradas de cariño, me ubican, me dan esa
información temida, bien explicada, dosificada, a mi ritmo, a mi entender y de
pronto vuelve la vida a mi cabeza, el calor a mi corazón, la alegría a mi
sonrisa y la esperanza a mi alma.
Quiero por tanto dar las gracias a la
asociación AEXPE que recompuso esos mil pedazos que el mazazo del diagnóstico
destrozo en mí gracias.
Nuria
Moreno.
Psicóloga de AEXPE
No hay comentarios:
Publicar un comentario